Imagínese un pez travieso guiñando un ojo en el fondo del mar el 1 de abril. Nada con una mirada traviesa y burlona, preparando sus bromas para sus amigos. Con un pequeño guiño, esconde los tesoros del Día de los Inocentes entre las algas y los corales. ¡Todos los demás habitantes marinos se divierten con las bromas y sorpresas de este pez bromista!