Maggie siempre está pensando en su barriga. Ella es más feliz con la comida en la boca y, créanos, NO es quisquillosa. A ella le ENCANTAN los dulces, pero ¿las verduras? Qué asco. No te sorprendas si ella sigue tus consejos sobre hábitos alimenticios saludables con un poco de azúcar, un poco de jarabe de chocolate, crema batida y una gran cereza encima, todo mientras se ríe profusamente de ti.